El viaje [Scott]

Scott despertó de un ligero golpe en la cabeza, era Sean de pie frente a él vestido de sargento, lucia como en sus mejores tiempo, al mirar a su alrededor se encontró en la oficina de la comisaria.

-Hey novato!!, que crees que haces?-preguntó alzando la voz, mirando desaprobatoriamente al joven.
-nos toca interrogar a aquel sujeto, el que arrestamos en el restaurant boutounés-dijo severo.

Scott quedo mirando unos instantes a Sean.

-¿Señor?- Susurro, dudoso. -No puede ser, ud estaba moribundo. ¿Donde están el Doc y Evita? Joder.- Dijo terminando cabreado.

Definitivamente ya se habia volvido loco.

-¿Eres idiota o estas drogado?-contestó el perro tornando su rostro amenazante, era un Sean distinto, inesperadamente alto y aunque con sus kilos, fornido. De ojos azules que penetraban hasta los chalecos antibalas.

-moribundo yo? eso quisieran, pero para su mala suerte sigo vivo y les haré la vida imposible-contesto serio, mientras los cadetes compañeros de Scott parecían reírse a sus espaldas.

-Ven...debemos ir al cuarto blanco-termino de decir comenzando a caminar por las instalaciones.

-Soy idiota señor.- Respondió de mala gana, poniéndose firme.

Dio una mirada de matón hacia atrás, no sabia con certeza donde estaba, pero independientemente de eso podía patearles el culo a todos los inútiles de los otros cadetes.

Luego, siguió a Sean. Lleno de dudas.

Todo se sentía real, la lustrosa baldosa a sus pies, el sol entrando por las ventanas de la comiseria, el sonido de las voces y las radios, todo aquello junto a una extraña sensación de "deja vú" que lo dejaba aturdido.
Ambos hombres tomaron un ascensor subiendo hasta el piso 15 donde se bajaron, era un silencio sepulcral.
-hace tiempo no subía hasta aquí-comentó el jefe, lucía mas viejo, mas gordo, mas cansado, miro a Scott con una sonrisa.

Sean fue primero en entrar al cuarto blanco.

Spoiler:

Scott ingreso tras Sean, aun aturdido. No tenia nociones de en que momento la apariencia de Sean había cambiado. Algo estaba mal, y podía ir de mal en peor.

-Tampoco yo.- Respondió a Sean. Y en realidad hacia mucho que no estaba en aquel lugar, fuese en referencia al pasado, o al futuro.

Observo el cuarto con detención.

El cuarto solo tenia una mesa blanca y dos sillas que se miraban de frente, todo lo demas era luminoso, lo que producia que al termino de un rato, comenzar a ver circulos negros en todas partes.
El perro avanzó esperando que el cadete entrara antes de cerrar la puerta con siete llaves.

Luego Sean se sentó en la silla de los acusados y espero que Scott lo hiciera al frente, en el del interrogador, una vez allí lo miró intensamente a los ojos.

-hazme solo una pregunta, solo una, vamos novato-dijo sumamente serio a tiempo que desde afuera del cuarto algo parecía mover la manilla y golpear la puerta cada vez mas bulliciosamente.

Scott inclino su cuerpo hacia adelante, sosteniendose el mentón con las manos.

-¿Por que he visto todo esto?- ¿Por que no puedo morirme de una puta vez, como tanto deseo? Lanzo una segunda pregunta, mentalmente.