[Sótano de la iglesia]Verdades[Ayleen, Lucas y Lalo]

Raul asiente mirando de reojo el intercambio del supuesto arma.
-eso espero...-respondió tomándose la cabeza.
-maldita sea, primero ese sujeto en el piso con Javier, ahora esto-pensó para sus adentros.
El lugar se habia vuelto denso.

Pero usted era de la Unión, siempre le puede pedir a sus viejos amigos que le llevene fuera de aquí.- Aileen parecía muy optimista sobre las posibilidades de aquel hombre, y que la Unión podría ayudarle, aún si hubiera desertado.

Pues yo espero que encontremos un buen refugio. En cualquier caso, si la Unión está tan preocupada, quizá este lugar sería peligroso ya que pueden venir más y más tropas a buscar eso del EDEN... por lo que dice, señor Raúl, da la impresión de que ya nos han dado a los superviviente por posibles focos de infección, y eso nos lo va a poner más difícil.

Al menos, si no encuentran eso de EDEN, no corremos peligro de que lancen un ataque intensivo sobre Chiapre.- La muchacha divagaba sobre sus posibilidades mientras esperaba a conocer al misterioso amigo de Anna.

En cualquier caso, su fuerte instinto de supervivencia, le decía que la Unión ya eran enemigos declarados de los supervivientes, pero que mientras en la ciudad hubiera algo que querían, aún tenían una oportunidad.

Lucas cerró los ojos. Se llevó la mano al rostro unos segundos y luego dijo.

- Ahora vuelvo.

Y acto seguido, salió por la escalera.

Comprendo inmediatamente la actitud de Lucas asi que simplemente le sigo el juego y actuo de manera relajada

Bueno, si es que hay una enfermedad dando vueltas y existe una cura tambien en la ciudad...esta claro que es lo que deberiamos hacer, encontrarla antes que la gente de la Unión, porque de seguro ellos no se pondran en un kiosco a repartirla

Aunque es complicado, porque definitivamente ellos deben tener mas información...y claro, mas personal y armas

Me quedo pensativo analizando todo lo que esta sucediando...la enfermedad, la cura, la unión, este sujeto...algo no me encajaba muy bien

Aileen iba a ofrecerse a acompañar a Lucas al momento, pero decidió que quizá algo en su mirada, no invitaba a que se uniera a él. Se quedó con Raúl y Lalo.- Yo estoy contigo, nunca reapartieron comida, pero esta enfermedad... me cuesta creer que nos vayan a dejar morir a todos, al fin y al cabo, si no queda gente a quien mandar ellos pieden el significado como grupo, ¿no?.- Preguntó la inocente muchacha.

El técnico miro a Ayleen pensativo.
-La Unión debe velar por todas las regiones, si hay que sacrificar una pequeña ciudad como esta por la seguridad global, no hay que ser muy inteligente como para atender a lo mas lógico-exclamó serio.
-Ademas los soldados son personas como tu y yo, ellos son los mas perjudicados al final, son el rostro visible del problema, son los que reciben y cumplen las ordenes del alto mando-agregó.

Algunos minutos después que Lucas se marchase se sintieron nuevamente pasos sobre ellos, por la escalera regreso Ana.

Vaya... pero aún así, si hay algo que ellos quieren contamos co algo de tiempo. Tiempo de sacar a los niños, al menos, ellos no tienen culpa de nada.- Parecía preocupada por lo que les pudiera pasar.


Creo que Lalo tiene razón, quizá deberíamos saber qué es eso del EDEN... quizá nos ayude de algo, si hay una enfermedad, ninguno estamos a salvo de ella. Lo virus no se contienen arrasando una ciudad...- Miró arriba al escuchar las pisadas y sonrió, quería ver de nuevo a Ana a ver qué pensaba ella.

-Sí están contaminados...no importa sin son mujeres o niños-contesto a la joven, miraba la carpeta en sus manos de extraña manera.
-Sea lo que sea el E.D.E.N parece ser la única pista...¿que piensan?, debe tratarse de alguna clase de sigla, no estoy seguro....-dijo mas como pensamiento en voz alta que como comentario.

Mientras Ricardo bajaba la escalera con Anna algo cansado luego de recolectar la madera escuchó voces que venían de abajo, parecían discutir algún asunto con comodidad y supuso que las personas llevaban un tiempo conociéndose así que él sería el extraño recién llegado.

- Me parece que yo he sido el último en unirse al grupo - le dijo a Anna mientras bajaban.

-No en realidad, habrán llegado hace una hora, son buenas personas-contesto hasta que finalmente ambos llegaron abajo.
La mujer dejo los maderos que traía consigo cerca del técnico mirando al grupo.
-Ricardo...ellos son Ayleen y Lalo, los conocí en el refugio comunal, chicos...el es Ricardo de quien les hable hace un momento-exclamó presentándolos.
Rául quedo en silencio unos momentos, dejo la carpeta a un lado, siempre vigilandola y tomo la madera comenzando acomodarla en el brasero de forma que alimentara el fuego.
-como están los alrededores?-preguntó
-bien, sin problemas-respondió Anna.

Quizá nunca sepamos que es eso de EDEN si no lo buscamos...- Aileen no dejaba de sorprenderse por cómo sostenía aquella carpeta, toda sy curiosidad le decía que tenía que echarle un vistazo, pero el buen juicio sugería lo contrario.

Al ver que Anna y el hombre del que le habían hablado llegaban la muchacha se puso en pie. El perro bajo ella pareció protestar un poco por aquel movimiento brusco.- ¡Qué bien! ¡Alguien más que está a salvo! Mi nombre en Aileen.- Dijo dándole un efusivo abrazo antes de que tuviera tiempo de reaccionar. Al separarse le señaló al perro.- Y este es Carpet.

-Hola ... Aileen- Dijo Ricardo algo descolocado a la muchacha que lo acababa de saludar efusivamente.
- Bonito animal tienes allí ... Hola Carpet - Dijo mirando al perro que lo miraba entre desconfiado y aburrido.

- Mi nombre es Ricardo - Dijo mirando a todos - hace unas horas me encontré con Anna cerca del cementerio y me trajo hasta acá, ¿que tal si nos acomodamos cerca del fuego? pasé un buen rato cortando la madera y me gustaría darle provecho -

Buenas...yo soy Lalo le digo poniendome de pie y estirando la mano para estrechar la suya

Un gusto ver a alguien mas por aca

Raul se enderezo volviendose a sentar y tomar las carpetas.
-Claro, calientate...todavía debes estar débil-dijo el técnico.
-Ahora debemos pensar que vamos hacer, que dicen chicos?-dijo animosa la famélica mujer, quien a penas se mantenía en pie.
-Primero hay que contarle todo a Ricardo, acaba de llegar...¿quien hace los honores?-dijo serio mirando al grupo.

Aileen regresó a su puesto y Carpet se acomodó de nuevo con ella. Parecía muy contento de estar junto al fuego como para ir a despegarse de él pronto. Ella miró a Anna y pareció recapitualr toda la información en su mente para hacer una síntesis.

- La Unión nos dijo hace nada que un meteorito se había estrellado y por eso sobrevinieron todos los cambios. Pero también están asustados porque hay una especie de virus que pone muy mal a la gente, los hace agresivos y que ataquen a otras personas... No sé si será muy contagioso pero los soldados tienen miedo de estar cerca de un infectado sin sus máscaras protectoras, y por lo que nos contó Anna mataron a gente enferma en el gimnasio.

- ¡Ah! Y Raúl dice algo de que los soldados están aquí para ir tras algo que quiere el nuevo líder de la Unión... Petrov, o una cosa así. Y que se llama EDEN, pero no sabemos ni qué es ni para qué sirve.- Concluyó finalmente haciendo una pausa larga para tomar aire. No era oradora y hablar tanto seguido casi se le hacía extraño, en el mundo del que venía se economizaban hasta las palabras.

Ricardo escuchaba atentamente a la joven contar la historia de lo sucedido, en su voz había angustia y cansancio, al igual que en el semblante de todos a quienes había visto hasta el momento.

El nombre de EDEN y Petrov resonaban en su mente como el vago recuerdo de un mal comercial de perfume, quizás los había oído anteriormente en su trabajo con al Unión, en alguna reunión o en algún texto, pero con la confusión que había en su cabeza ni siquiera estaba totalmente seguro de su nombre.

- ¿Un virus? - dijo de repente como entre extrañado y asustado - ¿una epidemia? al parecer esto va de mal en peor.... un minuto ... ¿dijiste soldados?, si ya han llegado refuerzos de la Unión ¿porque estamos aquí y no con ellos?-

¿No escuchaste la parte en que los soldados mataron a todos los enfermos? para ellos estamos contaminados, y no somos mas que basura a la que desechan cuando empieza a apestar

Hablo mirando hacia abajo, como si de un monologo se tratase

¿Cuando van a comprender que a la Unión no le importamos? lo unico que quieren es mantenernos controlados y si no estas de acuerdo ...

Levanto la mirada y hago un gesto pasando el dedo por mi cuello, simbolizando un corte

Ricardo escuchaba desconcertado, tenía fe en la Unión y le costaba creer que estas cosas pasaran tal como se las contaban. Quizás para ellos la historia lucía diferente y había alguna verdad subyacente que pasaba inadvertida para aquellos externos a la Unión, debía haber alguna justificación tras las muertes, alguna causa oculta que seguía un bien mayor. Pero al fin y al cabo comprendía su malestar y temor, muchos de los enfermos pueden haber sido conocidos o familiares de aquellos que ahora tenía en su presencia y justificadas las muertes o no, duelen de igual forma.

- Entiendo - Dijo tranquilo - es una lástima que las cosas sucedieran de esa forma. Si los militares ya no son una opción de ayuda quizás aun podemos contactar autoridades mayores... ¿no ha aparecido el representante de esta área? -

El técnico dio un suspiro ahogado.
-No se ha sabido nada de la señora Anthole, hasta ahora las ordenes las ha impartido Petrov, él asumió el control de la Unión-explicó a Ricardo para luego mirar el resto.
-Ya saben de lo que hablo ¿no?, digo...deben ver las noticias y saber de quienes estamos hablando-dijo serio, mas que mal de los presentes, nadie parecia ser culto, al menos políticamente.
-Petrov es el representante de Navnezh, Gersia. Quienes dominan el norte del mundo, dentro del consejo de representantes siempre ha habido alianzas encubiertas entre representantes, aunque claro están quienes son neutrales. Estaban los seguidores del Sabio, los representantes de Katrean, la señora Anthole y Marcus Carrasa, de Gersia el estado de Sabgnya, a cargo de Francoise Vichy, estos eran confidentes de Mihail Siddh Hess-comentó.
-Luego del desastre, como técnico de radios me encontraba en Gersia, allí también cayó un fragmento del asteroide dejando a muchas victimas, aún así recibimos ordenes directas de venir a Chiapre, luego por radio el propio Petrov, nos señalaba que habia información que el EDEN se encontraba en la ciudad, que lo había traído un tal...-dijo sin completar la oración, abrió la carpeta buscando entre las hojas completas de códigos, indescifrable para alguien común.
-Paul Rosemberg...-termino de decir cerrando abruptamente la carpeta.

Miro de reojo a Ayleen.
-¿nos darias algo de comida?-exclamó cambiando el tema al notar el carrito con los víveres.

La muchacha, en gran medida, se había perdido casi todo lo que raúl les había contado. Para ella, todo aquelllo, no eran más que una lista de nombres y lugares... y por alguna razón se suponía que ellos debían saber quién encajaba con dónde. Demasiado para un estómago vacío, y 17 años de vivir en la ignorancia política.


Entonces, Raúl, ¿vosotros creéis que todo esto del frío, la nieve y demás, está pasando en todo el mundo?- Tenía curiosidad por aquello, había tenido la esperanza de que sólo fuera en aquella parte del mundo, pero empezaba a dudar de aquello.

Con una sonrisa, y una nueva queja de su estómago, acercó el carrito a la fogata. En él había pocas cosas que se pudiera comer sin preparar pero se alegró al ver la fogata. El total de productos eran: una lata de piña pasada de fecha, dos sacos de harina, un par de huevos, un kilo de carne de soja y un tarro de café. No era mucho, pero al menos podrían compartirlo.

-Me temo que si, es como si entráramos a una nueva era glacial...en Gersia los temporales de nieve son peores, incluso llegaron informes que en Jurasan había granizado-dijo, para luego ver la comida que traía la joven.
-una lata de piña pasada de fecha, dos sacos de harina, un par de huevos, un kilo de carne de soja y un tarro de café-exclamó Anna sonriendo, para mirar el grupo.
-alguien sabe cocinar, para que me ayude hacer tortillas?, ademas seria necesario que alguien vaya a derretir algo de nieve para hacer café, el resto hay que guardarlo-dijo la mujer mirando con una sonrisa al grupo.

¡Tortitas! Yo no sé demasiado de concinar, pero llevo años ayudando a mi hermano, quizá podría ayudar un poco. Soy buen pinche.- Dijo con una sonrisa afreciéndose para la labor.

- mmm, yo no soy muy bueno para cocinar a menos que sean pastas listas o congelados - Dijo Ricardo con algo de vergüenza - Pero nunca es tarde para aprender, ya no creo que pueda mandar a pedir mi comida afuera como solía hacerlo nunca más, comida gersiana ....mmm... pollo oriental... -

Ricardo guardó silencio por un momento, le pareció casi ridículo e irrisorio que recordara tan claramente sus platos favoritos pero aun dudaba de su propio nombre. Esbozó una sonrisa de optimismo en su rostro y dijo:

- En fin, triste es el adiós a las cosas que uno acostumbra pero dicha encuentra el hombre en las cosas nuevas .... díganme que hay que hacer y intentaré hacerlo bien -

La mujer sonrío a Ayleen.
-Claro que te enseño...no es demasiado difícil-dijo, para luego mirar a Lucas y Lalo.
-pues ustedes podrían ir por algo de agua, y ver de paso donde se ha metido Lucas, no es bueno separarse...-exclamó preocupada.
-deberiamos dejar que se pierda, ese sujeto no me cae bien-comentó Raul mirando las mercaderias como poca cosa.
-lo que es yo, no pienso moverme de aquí, ya nos arriesgamos suficiente ayer-dijo volviendo a sus carpetas y códigos.
Anna miró al técnico con un suspiro.
-puedes quedarte aqui cuidando el refugio y de paso a Ayleen y a mi-bromeó
-Lucas debe estar preocupado por su hija, seguramente fue a ver si esta cerca, no es una mala persona...-explicó.

Ok...yo voy a buscar algo de nieve, ¿hay algun tarro por ahi? digo poniendome de pie